Os lo advertí, mi afán de conquista no tiene limite, y aunque la instantanea no me hace justicia, la verdad sea dicha, sirve como documento gráfico que corrobora mi nueva conquista, la cama de Eneko. No me ha resultado demasiado complicado conseguirlo, pues me suele traer bastante a menudo. Resultado, siestita bajo un jersey que estaba alli encima, y una nueva victoria. Tranquilos, no será la última por que cada vez hay mas confianza y, ya se sabe... En la próxima entrega os comentaré algo sobre el pueblo en el que vivo... podreís esperar? animo y hasta pronto!!!
jueves, 9 de julio de 2009
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